En Octubre de 2018 irrumpe Extintion Rebellion (XR) en Reino Unido gracias a que alrededor de 100 científicos y científicas de ese país, sumados a los activistas de Rising Up decidieron decir BASTA a las políticas de simulación y dilación que tanto el Gobierno Británico como las grandes Corporaciones de este país y las Multinacionales petroleras, aplicaban cada vez que se presentaban evidencias científicas sobre los efectos del calentamiento global y la relación que este fenómeno tiene con la forma de producción extractivista que grandes conglomerados empresariales y gobiernos mantienen para seguir expoliando recursos naturales son importar los efectos ecosistémicos que esto provoca.

Si bien es cierto que XR irrumpe en un momento clave para hacer evidente la grave crisis climática que tenemos, es también cierto que el legado de movimientos que luchan para frenar el despojo y los impactos socio-ambientales que el sistema de consumo tienen una amplia trayectoria en el Sur Global, donde destacan principalmente los pueblos originarios que desde cientos de años atrás vienen advirtiendo que este sistema depredador de la naturaleza y explotador de los seres humanos no puede ser sostenible y que sus impactos serán devastadores para la vida en el planeta. Sin duda, también le anteceden las acciones de toma de conciencia que los primeros grupos de ecologistas, allá por las décadas de los 60’s y 70’s, comenzaron a sembrar en condiciones de gran precariedad de información y denostación de las elites conservadoras al señalarlos como románticos hippies. También, gracias a los movimientos sociales como los generados por el levantamiento Zapatista en el ’94 y los movimientos antiglobalización de Seattle, que dieron paso a las acciones que Al Gore llevara a cabo y, de manera casi simultánea con XR, la irrupción de Greta y Friday For Future.

Hoy, XR se disemina por todo el mundo, llegando a México a finales de enero de 2019, prácticamente a los 2 meses de haber comenzado en Londres. En México, llega de la mano de Grian Cutanda, activista e impulsor de XR España, quien viene a México para realizar diversas actividades culturales y comenzar a tejer la primera célula de XR en suelo Mexica.

En este caminar, conoce a algunas personas como Verónica Acitores, Francisco Elizarras, Carlos Dayan, Paco Ayala, Piero Barandiarán, Gerardo Álvarez y otros compañeros y compañeras más que comienzan a integrar el primero Grupo que conformaría XR México. Cabe resaltar que la sede del movimiento se establece en Huerto Roma Verde, un espacio icónico de las luchas socio-ambientales en la Ciudad de México que hoy es un referente muy importante de la Regeneración Socio-Ambiental.

Posteriormente, se realizan conexiones en varias ciudades del país, destacando San Luis Potosí con Luis González y Melissa Jiménez, quien acudió a la primera marcha global en Atlanta en 2019, San Miguel de Allende con Martín López y Diana Hoogesteger, Puerto Escondido con Alejandra Morante y Carlos Acitores, Los Cabos, Stephanie Waffer, etc., quienes comienzan a integrarse en células que trabajan de manera local pero con una visión de integración regional y nacional.

XR Global contacta a los nodos de XR de distintos países de América Latina, donde comienza una labor de coordinación que ha venido construyéndose a lo largo de estos años, destacando que XR México ha colaborado de manera más cercana con XR Colombia.

El proceso continúa y esperamos que surjan muchas más células de XR por todo el país, que encuentren su identidad local sin violentar los valores y principios de XR pues esta Organización busca crear grupos autogestivos que impulsen acciones locales con efectos globales.

XR México continúa teniendo su sede en la Ciudad de México en el Huerto Roma Verde e integra las siguientes células para su Gobernanza: Comunicación, Diseño, Legal, Acciones Directas, Logística, Fondeo, Vinculación y Estrategia Política.